25/10/2010 - 14 usuarios online
Por Nanni Moretti (*)
"La habitación del hijo" describía la fragmentación de un núcleo familiar a la muerte de un chico, mientras que en "Caos calmo" se habla del nacimiento de una relación nueva entre padre e hija. La gran diferencia reside sobre todo en la reacción de las dos familias en relación con la muerte de sus personas queridas. En cuanto a que en estas dos películas he interpretado a un hombre destrozado es algo en lo que no me he detenido a pensar de forma racional, no sé por qué ha pasado.
Para mí, Pietro Paladini es una persona que ha decidido dar nueva importancia a las cosas que pertenecen a su vida y, sobre todo, establecer una nueva escala de valores para todo aquello que integra su existencia. Es un hombre que, al principio, quiere dar un orden exterior a su vida y que, después, hace una serie de elecciones en lo que para él es más importante. Es un personaje que me interesó desde el primer momento y que tuve grandes deseos de interpretar. En el libro de Veronesi, Pietro Paladini está siempre a la espera de un desmoronamiento que nunca llega, pero, al escribir el guión, nos pareció hermoso, además de justo, narrar el momento de su derrumbamiento mientras está vagando en coche por las calles de Roma, cuando estalla en llanto. Era como si, al recorrer Roma de noche, y encontrarse de pronto ante el colegio de su hija, lo mirara con ojos distintos, con los ojos de los espectadores, y se viera a sí mismo en las últimas semanas en esa plaza. Naturalmente, se le cae encima todo el dolor que ha provocado que tomara esa elección, ese cambio en su vida.
Desde que leí la novela, pensé que habría podido adaptarla para un guión cinematográfico y que me habría gustado mucho interpretar este personaje, pero nunca me vi dirigiendo esta película.
Esta experiencia interpretativa, en primer lugar, me ha acercado más aún a los actores, a sus dudas, a sus problemas, a sus pequeñas neuras. Pienso que esta relación con los actores me servirá para mis siguientes trabajos como director, que por ahora no existen porque sólo existe el caos pero no la calma que necesita un guionista-director para poner orden. La calma es necesaria para formalizar y poner orden precisamente en los sentimientos que quieres comunicar al público a través de una película. Pero los sentimientos por sí solos no son suficientes, hace falta el estilo, hace falta, precisamente, un asiento, un banco. Por ahora, sólo está el caos; más adelante llegará la calma con la que contarlo todo.
En "La habitación del hijo" hablé de la paternidad. Pienso que un verdadero actor no necesita tener experiencias en su vida personal para formalizarlas al interpretarlas en el personaje de una película, pero, en lo que se refiere a mí, que no sé si soy un verdadero actor, me parece que me ha ayudado mi experiencia como padre, tanto cuando, con Laura Paolucci y Francesco Piccoli, estábamos escribiendo el guión, como cuando interpreté las escenas con la niña.
Se ha hablado mucho de la escena de sexo, que me parece que ha quedado muy bien. Dicho esto, tanto en la vida como en las películas, son cosas que ‘pasan’, pero espero que al ver "Caos calmo" se hable de la historia, de los actores y de las actrices protagonistas de una película con un contenido muy rico.
(*): Nanni Moretti es director, guionista y actor, aunque en "Caos calmo", que se estrena el 20 de junio en España, ha cedido la silla de realizador a su compatriota Antonello Grimaldi.
© Alta Films-abc guionistas
11/06/2008 10:42:16